sábado, 8 de mayo de 2010

Prodigio del jazminero
A Tuta, amiga.

Es tanto… tanta la vida,
variado costado, tanto,
tanta vida en mi vida
momentos diversos, (¡cuántos!)

hay matices y colores
tanta tierra, cielo tanto,
tanto espacio, tanto tiempo,
las estrellas y mi canto…

que no puedo ser tan breve,
pues cuando se abran al fin,
aromas del jazminero,
¡olvidarán al jazmín!

Que no puedo ser tan breve
ni contar en un poema
la historia de mi vida
sin olvidar unas penas…

Pero ese camino enorme
resulta que es pequeño
es apenas un soplito
en el universo entero.

Por lo tanto bendiciones
y bonanzas, pues, entrego
además de los jazmines
prodigio del jazminero.

Trazaré las pinceladas
del camino que he andado,
beberé gotitas frescas
de lluvia, del zinc plateado.

No valdrá la pena entonces
pintar penas ni dolores
sino la gracia airosa
de la magia de las flores.